¿Por qué la sangre de los donantes altruistas es más segura?
Todo banco de sangre hace una serie de preguntas a los posibles donantes a fin de detectar si hay alguna razón para dudar que su sangre sea segura. El problema con los donantes de reposición es que existe presión para donar sangre, desde los familiares y conocidos del paciente, lo que puede llevarlos a donar aún cuando no cumplan con las condiciones para ser aceptados, ocultando enfermedades o conductas de riesgo para la transmisión de enfermedades a través de la transfusión. Es importante saber que a pesar de que se realizan análisis para detectar enfermedades transmisibles por transfusión a todas las unidades de sangre donadas, existe el llamado período de ventana, que es el tiempo que transcurre desde que ingresa al organismo un agente patógeno hasta que es posible detectarlo por las pruebas de laboratorio. Si una persona dona sangre estando en el período de ventana, el patógeno no podrá ser detectado, por eso es que se insiste tanto en la sinceridad para contestar las preguntas del cuestionario. Por el contrario, los donantes altruistas, cuya única motivación es ayudar con el regalo de la sangre, no tienen razones para dar respuestas falsas.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), hay mayor prevalencia del VIH y otros agentes patógenos en la sangre de los donantes de reposición, en comparación con los altruistas.
Hace décadas que nuestro Banco de Sangre cuenta con métodos de detección de patógenos de transmisión directa como HIV./SIDA, hepatitis C y B, Chagas, HTVI y II y sífilis, que junto a la creciente implementación de métodos y tecnologías que garantizan la calidad y seguridad de nuestros procesos, han llevado a que el riesgo de contagio por transfusiones sea mínimo. Ahora el reto es garantizar que nuestro Hospital cuente con un abastecimiento de sangre oportuno, seguro y suficiente al alcance de todos sus pacientes. El trabajo concertado entre el Banco de Sangre, el Hospital Clínico, los centros de estudiantes, las direcciones de asuntos estudiantiles de las distintas facultades de la Universidad de Chile y otros actores de la comunidad universitaria, a fin de promover donaciones altruistas y repetidas, puede ayudar significativamente a lograr esa meta.
En 2009, en Melbourne, Australia, la OMS reunió un grupo de 65 expertos en medicina transfusional, responsables políticos, gubernamentales y no gubernamentales de 38 países de las distintas regiones de la OMS, como participantes en la "Consulta mundial sobre el 100% de donaciones voluntarias y no remuneradas de sangre y sus componentes". Como resultado de esta reunión se emitió la llamada Declaración de Melbourne en la que, entre otras cosas, se hace un llamado a todos los gobiernos para lograr el 100% donaciones voluntarias y no remunerada para el año 2020, como la piedra angular de sus políticas de sangre.
En nuestro país el Ministerio de Salud ha elaborado la Política Nacional de Sangre (Ordinario 2344 de 23 Julio 2009), cuyo Programa permite la implementación de esta política, el cual plantea como primer objetivo el cambiar la donación de reposición a voluntaria altruista. Este Programa establece como meta nacional lograr el 50% de donaciones altruistas para el año 2015, mientras que nuestro banco de sangre se encuentra en la tarea de lograr, al 31 de diciembre de 2013, una cobertura del 30% de donaciones altruistas.