La afasia es un trastorno adquirido del lenguaje causado por un daño cerebral que afecta la capacidad de la persona para comunicarse ya sea al hablar o escribir. Hay diferentes tipos de afasia y con distintos grados de severidad, los que pueden presentarse en personas de distintas edades y sexo, independiente del género y edad, aunque suele ser más frecuente en personas mayores. La principal causa de afasia son los ataques cerebrovasculares (ACV), donde aproximadamente 1 de cada 5 personas presentarán Afasia. En Chile se estima que cerca de 7.000 personas presentarán afasia cada año. Otras causas frecuentes de afasia son los traumatismos encefalocraneanos (TEC), infecciones y enfermedades degenerativas como el Alzheimer.

• Informarse sobre la afasia ayuda a eliminar estigmas y malentendidos, promoviendo una comunicación más inclusiva.

• Fomentemos la empatía y el apoyo social para quienes padecen de esta condición.

• Conversemos sobre la importancia de acceder en forma precoz a rehabilitación con profesionales especializados y así contribuir con una mejor calidad de vida de las personas con afasia y su entorno.

• Hable mirando al rostro.

• Reduzca los distractores dentro de las posibilidades.

• Alerte al paciente que está iniciando una conversación, ya sea saludándolo o llamándolo por su nombre.

• Hable de forma simple, usando frases cortas y sencillas, en forma pausada sin caer en exageraciones.

• Pregunte en forma breve y sintética. Ofrezca alternativas de respuesta si es necesario.

• Asegúrese que el mensaje haya sido entendido. Repita aquello que quiera destacar o que sea lo importante.

• Solicite repetición de aquello que no se entienda.

• No ignore los problemas de comunicación que puedan surgir. Con tranquilidad retome el tema más adelante si hay mucha confusión.

• Converse de forma adulta. Es decir, no le hable como si fuera niño.

• Inclúyalo en las conversaciones. Pida y valores su opinión, especialmente con respecto a los asuntos familiares.

• Anime cualquier tipo de comunicación, ya sea mediante el habla, los gestos, las señales, o los dibujos.

• Evite corregir lo que dice. Dele tiempo para que hable.

• Ayúdelo a participar en actividades fuera del hogar.

El mes de junio, como mes de la concientización sobre la afasia, es una oportunidad valiosa para educar, sensibilizar y apoyar a las personas que enfrentan este desafío. Al fomentar la comprensión y ofrecer ayuda, podemos contribuir a una sociedad más inclusiva y solidaria, donde todos tengan la oportunidad de comunicarse y participar plenamente en la vida.

Si quieres infórmate más sobre la afasia visita https://www.asha.org/public/speech/spanish/la-afasia/